

18 capítulos y más de 158 artículos componen el proyecto que empezó su curso en el Congreso este 13 de febrero
Finalmente, este 13 de febrero fue presentada ante el Congreso la propuesta de reforma a la salud por el presidente Gustavo Petro y la ministra de Salud, Carolina Corcho. El documento consta de 18 capítulos y más de 158 artículos.
Son cinco los ejes principales de esta reforma, según lo expuesto por la ministra Corcho:
1. Administración pública de los recursos: “Se recuperarán los recursos públicos para que de manera transparente y equitativa sean usados en todo el territorio nacional donde en el actual sistema no llega”.
2. Salud primaria: atención prioritaria y red de centros en todo el territorio nacional para prevenir la enfermedad de manera rápida.
3. Régimen laboral especial para trabajadores de la salud. La ministra Corcho mencionó: “Debemos cuidar a quienes cuidan la vida en Colombia, con remuneraciones justas”.
4. La salud no es solo la atención de la enfermedad: “Los determinantes son el agua, el medio ambiente, la cultura y todos los elementos que construyen la salud de los colombianos”.
5. Se construirá un sistema público de información para garantizar la transparencia de los recursos de la salud y combatir la corrupción.
A partir de esas líneas, las generalidades del articulado presentado este 13 de febrero apuntan a establecer un modelo de atención regido por el principio de universalidad, enfocado en la prevención, que pretende cubrir todo el territorio nacional, que incluya a todas las personas sin necesidad de tener un carnet de afiliación, entendiendo la salud como un derecho fundamental.
En tal sentido, se plantea un sistema que entiende que es fundamental garantizar también la satisfacción de los factores y derechos que influyen en la salud de la población, fortaleciendo el monitoreo y oportuno diagnóstico de enfermedades, incluyendo las de orden mental.
Para ello, se crearán los Centros de Atención Primaria (CAP), cuya función primordial será organizar el territorio en un promedio de 25.000 personas por cada uno y distribuidos según el lugar de vivienda o trabajo. Así, los equipos médicos visitarán de manera rutinaria y constante a las familias de dicho territorio con el fin de disminuir las causales de la enfermedad o atenderla en estado.
El futuro de las EPS
Para la transición, el sistema ADRES (Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud) se fortalecerá para convertirse en un pagador único.
Las EPS que hoy se encuentren condiciones financieras óptimas acogerán a los pacientes de aquellas que serán eliminadas por encontrarse en proceso de liquidación. De esta manera se evitará que las personas se queden sin cobertura. En el mismo sentido, la Nueva EPS se fortalecerá para cubrir los territorios que lleguen a quedarse sin aseguramiento.
Según el gobierno, una vez concluya la transición, las EPS que se acondicionen a este nuevo sistema de prevención y atención primaria podrán desarrollar su objeto social como IPS y como auditoras del cobro al ADRES.
En resumen, se trata de un modelo en el que los CAP, los centros especializados del servicio y las redes integrales e integradas de salud, que prestan servicios como hospitalización, urgencias médicas y odontológicas, rehabilitación, laboratorios, farmacéuticas y ambulancias, entre otros, estarán conformados por entidades públicas, privadas y de orden mixto.
Los trabajadores de la salud
En lo relacionado a quienes trabajan en el sector salud, el proyecto de reforma plantea dignificar sus condiciones laborales mediante la recuperación de la autonomía médica y la autorregulación, con ética y evidencia científica.
Además, contempla incluir mayor estabilidad y facilidad para incrementar los conocimientos del personal con educación continua y actualización permanente, especialmente para quienes están en territorios. También establecerá lineamientos para recertificar de todos los trabajadores de la salud y así garantizar un servicio actualizado y de calidad siempre.
Aseguraron que la reforma toma lo mejor que tiene el sistema de salud actual, apoyándose en las capacidades del sector privado para la prestación del servicio, en sus clínicas y hospitales.
Además, que los planes complementarios, medicina prepagada o pólizas de salud seguirán funcionando con normalidad y que durante la transición, ningún paciente que hoy esté siendo atendido o en un tratamiento de alta complejidad quedará sin cubrimiento.
Puedes descargar la reforma completa aquí.