
Las comisiones económicas aprobaron en primer debate un monto de $546,9 billones, tras eliminar ocho artículos polémicos. Petro celebró que no será necesario aplicar impuestos impopulares a gasolina y cerveza.
Por primera vez en este cuatrienio, el Gobierno y la oposición cedieron en sus posiciones para alcanzar un acuerdo en torno al Presupuesto General de la Nación de 2026. Este 24 de septiembre, las comisiones económicas del Congreso aprobaron en primer debate el proyecto por $546,9 billones, tras una reducción de $10 billones frente a la propuesta inicial del Ejecutivo.
La negociación incluyó la eliminación de ocho artículos que generaban resistencia en la oposición, relacionados con vigencias futuras y autorizaciones de crédito. Con ello, las bancadas que habían anticipado un rechazo, respaldaron la ponencia presentada por la representante Olga Lucía Velásquez (Alianza Verde).
El presidente Gustavo Petro celebró la decisión y destacó que el recorte permite aliviar la presión sobre los contribuyentes:
“Lo más justo es no solicitar incrementos de impuestos sobre la gasolina y la cerveza”, afirmó, aludiendo a medidas que se habían contemplado en la ley de financiamiento y que venían generando malestar e impopularidad.
El ministro de Hacienda, Germán Ávila, señaló que el acuerdo refleja la voluntad política de evitar que el Presupuesto sea expedido por decreto, como ocurrió en el pasado. Sin embargo, la discusión no termina aquí: el proyecto aún deberá superar las plenarias de Senado y Cámara antes del 1 de octubre, y persiste el reto de cubrir un déficit estimado en $16,3 billones, lo que mantiene viva la controversia sobre la necesidad de una nueva reforma tributaria.
A pesar de estas tensiones, la aprobación en primer debate envía un mensaje de consenso institucional y marca un precedente de cooperación entre sectores que, hasta ahora, habían mantenido una fuerte confrontación política en torno al manejo de las finanzas públicas del país.